Preservación alveolar
Los dientes se deben extraer por diferentes causas. Las caries, fracturas y enfermedad periodontal son las más comunes. Un diente está formado por la corona (parte que nosotros vemos) y la raíz. Esta raíz está rodeada a su vez por hueso y encía. Una sonrisa ideal es la conjunción de las coronas con el hueso y encía que rodean la raíz del diente.
La encía tiene un festoneado y volumen muy característico que está en armonía con la corona del diente. Cuando extraemos un diente, el hueso y la encía que rodean el diente pierden la mitad del volumen en menos de un año. Esta pérdida de volumen rompe la naturalidad de una sonrisa.
La forma de prevenir está pérdida de volumen es mediante la colocación de un biomaterial en la cavidad donde se ubicaba el diente extraído. Este procedimiento, llamado preservación de alveolo, se realiza el día de la extracción del diente y es totalmente indoloro, sencillo y seguro.
Extracción del incisivo lateral izquierdo y corona de resina provisional. Nótese la pérdida de volumen de encía.
Extracción del canino superior derecho con preservación alveolar. Nótese el mantenimiento del volumen de la encía y la armonía de la sonrisa.